Arte: 'Ortego mínima: Reflejos de interior'
La muestra, Ortego mínima: Reflejos de interior es una mirada a la obra en pequeño formato de la obra de Esther Ortego, comisariada por María Jesús Aragoneses, en la que se recoge parte de la obra de esta invisibilizada artista.
En esta exposición, pequeña en tamaño pero grande en significado, podemos ver una pequeña parte de las obras de esta artista que nos dan una clara muestra de la expresividad que desarrolló a lo largo de su vida y de su impactante mundo interior. Esta artista vivió y creó su obra entre 1934 y 2012, teniendo su periodo de visibilidad en el entorno de los años ochenta del siglo pasado. Como en tantos otros casos de artistas mujeres, su obra va desapareciendo hasta ser completamente invisibilizada y, en palabras de la comisaria de la muestra, “su legado se quedó sumido en los márgenes del sistema del arte, aunque por su calidad y aportación artística merece un lugar destacado en el universo del arte contemporáneo”.
Esther Ortego pinta seres humanos en los que proyecta sus emociones, no siempre “buenas”. En esta exposición podemos ver pequeños retratos de personajes imaginarios en un ejercicio de pintura expresionista de tremenda crudeza, según las palabras de la misma Ortego: “El mundo del disfraz como el mundo de lo verídico tras la mentira aparente, el doble sentido de lo que se asoma a una realidad desde otra verdad”. El uso de materiales, texturas y colores es un espectáculo al que merece la pena asistir.
En una época y un país en que ser mujer y ser artista eran hechos incompatibles, Esther Ortego (1934), escapando al destino de ángel del hogar que se le había adjudicado por el hecho de nacer mujer, encuentra su propio exilio interior para desarrollar un universo tan propio como otros tantos casos de mujeres artistas que lograron sacar un importante corpus de obra que está siendo sistemáticamente ignorado por el sistema del arte. El que haya artistas de la siguiente generación, como es el caso de la comisaria de la muestra, María Jesús Aragoneses, que pongan empeño en visibilizar un trabajo de importancia para el patrimonio cultural de las mujeres artistas de este país, es algo que hay que poner en valor y darle la difusión que merece.
Recurriendo de nuevo a las palabras de la comisaria de la muestra: “En el caso de las mujeres creadoras, esta injusticia se hace más patente, por lo que es un deber visibilizar y potenciar sus legados para contribuir a la equidad de género, combatir la discriminación ejercida y recompensar así una labor injustamente silenciada. En palabras de Walter Benjamin: “… No es lo mismo el olvido en el sentido de desconocimiento del pasado que el olvido en el sentido de no dar importancia al pasado. En el primer caso, el olvido es ignorancia y en el segundo, injusticia”.
Ortego mínima: Reflejos de interior
Centro Cultural Padre Vallet, Pozuelo de Alarcón
Del 19 de enero al 15 de febrero